La ceremonia se desarrolló el 8 de septiembre recién pasado y congregó a la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Mulchén, autoridades regionales del Servicio del Patrimonio Cultural y del Ministerio de las Culturas las Artes y el Patrimonio, con la presencia de Nélida Pozo,  Directora del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural de Chile entre otros invitados.

El memorial representa una acción colectiva de salvaguarda de las memorias de la zona maderera de Collipulli y Mulchén.  Esta iniciativa fue levantada por la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Mulchén y apoyada por el Programa de Derechos Humanos y Memoria del Ministerio las Culturas, las Artes y el Patrimonio, acción que el Museo Regional de la Araucanía acoge en el parque exterior de la casona Thiers.

Entre el 5 y el 7 de octubre del año 1973, una patrulla, compuesta por carabineros, militares y civiles, llegó sin aviso al sector Los Guindos, en la reserva Nacional de Malleco, pre cordillera de Mulchén y Collipulli, con el objetivo a detener  a 18 trabajadores de la Corporación Nacional Forestal CONAF, quienes en ese momento desarrollaban su cotidiana vida laboral y familiar. Las víctimas fueron torturadas, ejecutadas e inhumadas ilegalmente en una fosa. Otras víctimas fueron ejecutadas y diseminadas por sus victimarios en la ribera del río Renaico. A finales de los años 70, los cuerpos fueron exhumados ilegalmente y los hicieron desaparecer, en el operativo conocido como “Retiro de Televisores”. 

Este memorial se hace presente a 50 años del golpe cívico-militar. Esta obra arquitectónica es un lugar para recordar, para no olvidar jamás estos oscuros pasajes de nuestra historia, revitalizando nuestra memoria colectiva y para que nunca más se repitan estos hechos de horror y grave atentando a los Derechos Humanos.