El sitio arqueológico Gorbea-3 corresponde al eltun o cementerio antiguo de mayores dimensiones excavado hasta ahora en el centro-sur de Chile. Pertenece a la cultura mapuche de tiempos coloniales tardíos y republicanos, y probablemente estuvo en uso desde el siglo XVIII hasta comienzos del siglo XX, momento en el que se fundó la ciudad de Gorbea en la Región de La Araucanía.
En el lugar –actualmente un predio forestal a las afueras de dicha localidad– no se observa ninguna evidencia del cementerio o de los trabajos arqueológicos efectuados hace ya casi 50 años, por lo que no se lo conoce, ni menos reconoce como un espacio patrimonial ligado al pasado del pueblo mapuche o de la comuna. Los materiales recuperados y la documentación asociada, sin embargo, dan cuenta de que se trata de un yacimiento notable, aunque insuficientemente valorado hasta ahora por la arqueología.
Excavación y hallazgos
El antiguo eltun fue excavado entre 1969 y 1973 por un equipo de jóvenes arqueólogos bajo la dirección de Américo Gordon y con el patrocinio del Museo Nacional de Historia Natural. Al cabo de cinco campañas de terreno, se logró recuperar y registrar 172 tumbas, gran parte de ellas correspondientes a entierros en canoas funerarias o trolof, como se denomina al tronco de pellín (Nothofagus obliqua) ahuecado y cortado para hacer las veces de ataúd. Entre las ofrendas y ajuares asociados, se hallaron más de 300 vasijas cerámicas, más de una decena de aros cuadrangulares (chawai), tupus, un anillo, cruces de bronce y plata, chaquiras (cuentas de vidrio) y agujas. Además, se levantaron restos óseos correspondientes a, al menos, 50 individuos.
La mayor parte de los materiales culturales recuperados en el sitio Gorbea-3, además del registro documental –diarios de terreno, láminas y recortes de prensa–, se conservan actualmente en el Museo Regional de La Araucanía. Dentro de los primeros, sobresalen las piezas cerámicas (295 unidades completas y fracturadas), que conforman una de las colecciones de alfarería mapuche arqueológica más importantes del país. Las evidencias bioantropológicas, en tanto, se encuentran depositadas en el Museo Nacional de Historia Natural. En total, los materiales recuperados en el eltun de Gorbea suman 466 piezas, portadoras de información relevante sobre la población que habitó el territorio desde la época colonial, sus prácticas culturales y la integración de tradiciones foráneas a su alfarería y religiosidad, entre otros aspectos.
Descarga el artículo completo “Lo que el tiempo se llevó. Revisión de Gorbea-3, un antiguo eltun en la cuenca del río Donguil”, por Rodrigo Mera y Doina Munita.